Sin lugar a dudas imponente. Espectáculos al estilo de Las Vegas o La Habana en aquel entonces algo inusitado. Los comentarios de los adultos eran muchos y variados, desde la belleza de las fuentes hasta la desnudez de las artistas y lo caro del servicio. La carterita de noche de Mami venía llena de las sombrillitas chinas que adornaban los cocteles. Mi regalo por portarme bien. Con esos parasoles caminaban mis muñecas de papel - ¡oh, mis queridas mariquitas! - en sus desfiles de modas. Más adelante, después de La Era, se hicieron varios espectáculos a los que llegué a asistir y sí, en verdad, las fuentes eran sensacionales. Luego llegaron las grietas, los sistemas que se oxidaban, la falta de mantenimiento ya fuera por poco deseo o por pocos recursos o porque lo que había se lo embolsillaba alguno. Quién sabe. Además, como comentó una de las tías, ¿un teatro de agua y luz en un país donde no hay ni agua ni luz?
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
Search This Blog
INVITACION AL RECUERDO
Los dominicanos que nacimos entre 1930 y 1961 nacimos en La Era. Los que nacimos en La Era aprendimos desde la cuna a hablar poco y callar todo. Los que nacimos en La Era sabíamos por ósmosis que vivíamos en el terror. Lo sabíamos aunque nadie nos lo explicara. Los que nacimos en La Era recordamos tiempos tan apacibles que tenían que ser un mito. Y así era. Debajo de esa engañosa tranquilidad había un tumulto de horrores y temor que lo empañaba todo. Y aún así vivimos una niñez dorada... ESTE ES EL SITIO PARA RECORDAR...
No comments:
Post a Comment